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domingo, 29 de marzo de 2015

El Rescate del Sagrado Femenino (español)



“El rescate del Sagrado Femenino”


Interesante vídeo que habla del Sagrado Femenino como un símbolo que se está rescatando actualmente debido a la búsqueda de la mujer de algo que es específicamente femenino.
Durante 24 minutos se nos habla de la Diosa, la reverencia a la Naturaleza, la Gran Madre y un denominador común en todas las culturas como es el ciclo menstrual.
Reconquistar la polaridad divina y humana, ya que hoy en día, la mujer está intentando rescatar su papel dentro de la estructura contempóranea. La repetición de el modelo masculino como forma de pensamiento que nos lleva a preguntarnos … ¿qué es lo que me diferencia del hombre?. De aquí pasamos a la búsqueda en las culturas antiguas: Sociedad Matrifocal en la que lo femenino era el centro de la vida y la energía Matríztica como potencia y no como poder ó dominación, sino como equilibrio.

El rescate del Sagrado Femenino como camino y así poder adquirir otra energía, otra visión, otro comportamiento.


VÍDEO: “El rescate del Sagrado Femenino"


sábado, 6 de diciembre de 2014

מחזור סיפורים הודים: כיצד קיבל גאנש ראש של פיל

מחזור סיפורים הודים:  כיצד קיבל גאנש ראש של פיל


לסיפור על ראש הפיל של גאנש, יש גרסאות שונות ומגוונות. בגרסה המקובלת ביותר, עיצבה פרווטי, אימו של גאנש, את גופו של הילד מהאבק שהסירה מגופה ואז הציבה אותו בכניסה לבית על מנת שאיש לא יפריע לה בזמן המיקלחת. כאשר הופיע שיווה, בעלה של פרווטי, הוא לא הכיר את הילד אשר לא נתן לו להיכנס לבית והגיב על ידי שריפת ראשו. לאחר שנודע לו כי הילד הוא בנו, חיפש שיווה, יחד עם שאר האלים, ראש חלופי לילד, עד שלבסוף מצאו ראש של פיל צעיר. כפיצוי, נתן שיווה לגאנש את תפקיד ראש משרתיו. בגרסה אחרת של הסיפור, הראתה פרווטי את תינוקה החדש לשיווה, אשר למראה פניו שרף את ראשו של התינוק. במצוות האל ברהמה החליף שיווה את ראשו השרוף של גנש בראש הראשון אותו מצא, ראש של פיל.

החוסר בחט אחד מוסבר גם הוא על ידי מיתוסים שונים. לפי אגדה אחת, (האווטר התגלמות מוחשית) השישי של,  וישנושנקרא פאראשורמה, הגיע יום אחד לבקר את שיווה אך נתקל בדרכו בגנש שחסם את הדרך. פאראשורמה זרק לעברו את הגרזן שלו וגנש, ביודעו שהגרזן נשלח אליו על ידי שיווה, התיר לו לכרות את אחד מחטיו. מיתוס אחר טוען שבשעת הכתיבה של המָהַאבּאראטַה )שהוכתבה לו על ידי ויאסה), נשברה הציפורן איתה כתב גנש את הטקסט. ובבהילות הכתיבה של דברי הקודש הוא כרת את חטו השמאלי כתחליף לעט השבור.
גנש ידוע כאומקרה, כיוון שגופו משקף את מנטרת האוֹם, בשל כך נתפס גנש כהתגלמותו של היקום כולו. ראש הפיל שלו מסמל את החוכמה והיופי של הפיל החזק אך העדין. כלי התחבורה שלו הוא עכבר, מה שמסמל את יכולתו לגלות כל סוד קיים. בחירתו בעכבר כבן לוויה מעידה בנוסף על צניעותו הרבה של גנש.
גנש הוא אל המזל, אל אחזקת הבית ואל הכתיבה. הוא נחשב למסיר מכשולים מאיימים ולכן נהוג לפנות אליו לפני ביצוע כל משימה בתפילה: אַוּם שְרִי גַאנֶשאַיה נַמַה -ברכו את שמו של גנש. הוא נחשב לרחום עד כדי כך שדי אך להיזכר בו כדי לקבל את בירכתו והגנתו.

פעם, כך מספר הטקסט, אישתו של שיווה (Shiva) – פרבטי (Paravati) – יצרה דמות של ילד מתוך הזיעה והשמן שניגר מגופה והפיחה בו רוח חיים. היא ביקשה מהילד שישמור על ביתה בזמן שהיא רחצה את גופה במימי הגנגס. כששיווה רצה להיכנס לבית שעליו הופקד הילד, חסם הילד את הכניסה בגופו. בפרץ של זעם כרת האל את ראשו של הילד.
משחזרה פרבטי לביתה ונתקלה בגופתו של ילדה, התמלאה היא בעצב ויגון. רחמיו של שיווה נכמרו עליה והוא הבטיח לה בתמורה להחליף את הראש החסר. הוא שלח את שליחיו לכל קצוות הארץ לחפש ראש מתאים. הוא נתן להם הוראה מפורשת: למצוא תינוק ישן שפונה לכיוון צפון ולקחת את ראשו. השליחים מצאו תינוק של פיל בתנוחה המתבקשת והביאו את הראש לשיווה שחיבר אותו לגופו של הילד המת. כך נוצר גנש – בנה של פרבטי, חצי אדם חצי פיל. ככל שעבר הזמן, שיווה חיבב את גנש יותר ויותר ויום אחד הפך אותו למנהיגם של ה ganas – משרתיו האישיים של שיווה. מאותו הרגע הם נקראו גאנאפטי. כך הילד בעל ראש הפיל קיבל את השם גנשה (בהודית Isha משמעותו מנהיג).



domingo, 6 de mayo de 2012

En el Ciclo de cuentos Hindues, esta semana... EL ORO Y LAS RATAS


EL ORO Y LAS RATAS
Había una vez un rico mercader que, a punto de hacer un largo viaje, tomó sus precauciones. Antes de partir quiso asegurarse de que su fortuna en lingotes de oro estaría a buen recaudo y se la confió a quien creía un buen amigo.
Pasó el tiempo, el viajero volvió y lo primero que hizo fue ir a recuperar su fortuna. Pero le esperaba una gran sorpresa.
-¡Malas noticias! -anunció el amigo-. Guardé tus lingotes en un cofre bajo siete llaves sin saber que en mi casa había ratas. ¿Te imaginas lo que pasó?
-No lo imagino -repuso el mercader.-Las ratas agujerearon el cofre y se comieron el oro. ¡Esos animales son capaces de devorarlo todo!
-¡Qué desgracia! -se lamentó el mercader-. Estoy completamente arruinado, pero no te sientas culpable, ¡todo ha sido por causa de esa plaga!
Sin demostrar sospecha alguna, antes de marcharse invitó al amigo a comer en su casa al día siguiente.
Pero, después de despedirse, visitó el establo y, sin que lo vieran, se llevó el mejor caballo que encontró.Cuando llegó a su casa ocultó al animal en los fondos. Al día siguiente, el convidado llegó con cara de disgusto.
-Perdona mi mal humor -dijo-, pero acabo de sufrir una gran pérdida: desapareció el mejor de mis caballos.
-Lo busqué por el campo y el bosque pero se lo ha tragado la tierra.-¿Es posible? -dijo el mercader simulando inocencia-. ¿No se lo habrá llevado la lechuza?
-¿Qué dices?-Casualmente anoche, a la luz de la luna, vi volar una lechuza llevando entre sus patas un hermoso caballo.-¡Qué tontería! -se enojó el otro. ¡Dónde se ha visto, un ave que no pesa nada, alzarse con una bestia de cientos de kilos!
-Todo es posible -señaló el mercader-. En un pueblo donde las ratas comen oro, ¿porqué te asombra que las lechuzas roben caballos?
El mal amigo, rojo de vergüenza, confesó que había mentido. El oro volvió a su dueño y el caballo a su establo.
Hubo disculpas y perdón.Y hubo un tramposo que supo lo que es caer en su propia trampa.



lunes, 30 de abril de 2012

Ciclo de Cuentos Hindúes, y esta semana... Las Creencias.






EL PESO DE LAS CREENCIAS


Dos jóvenes monjes fueron enviados a visitar un monasterio cercano. Ambos vivían en su propio monasterio desde niños y nunca habían salido de  él. Su mentor espiritual no cesaba de hacerles advertencias sobre los peligros del mundo exterior y lo cautos que debían ser durante el camino.
Especialmente incidía en lo peligrosas que eran las mujeres para unos monjes sin experiencia:


-Si veis una mujer, apartaos rápidamente de ella. Todas son una tentación muy grande. No debéis acercaros a ellas, ni mucho menos hablar, por descontado, por nada del mundo se os ocurra tocarlas. Ambos jóvenes aseguraron obedecer las advertencias recibidas, y con la excitación que supone una experiencia nueva se pusieron en marcha.


Pero a las pocas horas, ya punto de vadear un río, escucharon una voz de mujer que se quejaba lastimosamente detrás de unos arbustos. Uno de ellos hizo ademán de acercarse.


-Ni se te ocurra -le atajó el otro-. ¿No te acuerdas de lo que nos dijo nuestro mentor?
-Sí, me acuerdo; pero voy a ver si esa persona necesita ayuda -contestó su compañero.


Dicho esto, se dirigió hacia donde provenían los quejidos y vio a una mujer herida y desnuda.
-Por favor, socorredme, unos bandidos me han asaltado, robándome incluso las ropas. Yo sola no tengo fuerzas para cruzar el río y llegar hasta donde vive mi familia.


El muchacho, ante el estupor de su compañero, cogió a la mujer herida en brazos y, cruzando la corriente, la llevó hasta su casa situada cerca de la orilla. Allí, los familiares atendieron a la asaltada y mostraron el mayor agradecimiento al monje, que poco después re-emprendió el camino regresando junto a su compañero.


-¡Dios mío! No sólo has visto a esa mujer desnuda, sino que además la has tomado en brazos.
-Así era recriminado una y otra vez por su acompañante. Pasaron las horas, y el otro no dejaba de recordarle lo sucedido.
-Has cogido a una mujer desnuda en brazos! ¡Has cogido a una mujer desnuda en brazos! ¡Vas a cargar con un gran pecado!


El joven monje se paró delante de su compañero y le dijo:
-Yo solté a la mujer al cruzar el río, pero tú todavía la llevas encima.



domingo, 15 de abril de 2012

Esta semana en el Ciclo de Cuentos Hindúes... LA FELICIDAD

LA FELICIDAD 

Un gato grande ve cómo un gatito trataba de agarrarse la cola y le pregunta:
¿Por qué lo haces?
Y el gatito dijo:
"Porque he aprendido que lo mejor es la felicidad y mi cola es la felicidad"

El gato grande le respondió:
"Yo también sé que mi cola es la felicidad, pero me he dado cuenta que cuando la persigo se me escapa y cuando voy haciendo lo que tengo que hacer ella viene detrás de mí por donde quiera que yo vaya"



miércoles, 21 de marzo de 2012

Ciclo de cuentos Hindúes, y esta semana...

 
EL ESCRIBA DE VYASA

Gracias a su colmillo roto, Ganesha pudo ayudar a Vyasa a escribir el Mahabharata.
Un día el sabio Vyasa se aproximó a Brahma y le dijo: "¡Oh Señor!, mi inteligencia y memoria han desaparecido. Por favor dime qué debo hacer".

El dios le respondió: "¡Oh Vyasa!, ¿no sabes que todos los problemas surgen por olvidar al Señor Ganesha? Al iniciar cualquier rito, actividad productiva o social, al entrar en un nuevo hogar o construcción, y al comenzar toda labor que tenga como finalidad el conocimiento, se destruirán los obstáculos si uno recuerda y venera a Ganesha.

Refúgiate en él, complácelo con himnos y adóralo, y serás capaz de terminar cualquier actividad. De otra manera podrás intentarlo por un millón de años, pero no alcanzarás el éxito completo
Así lo hizo Vyasa y poco después se hallaba sentado en su ashram, con el firme propósito de escribir el Mahabharata, pero debido a la velocidad de sus pensamientos, necesitaba de un escriba divino que tomara su dictado. Vyasa meditó en Brahma, quien le sugirió que nuevamente pidiera ayuda a Ganesha. Vyasa oró a Ganesha y el dios apareció ante él.

El sabio le preguntó: "¡Oh Señor!, ¿serías tan gentil de tomar el dictado del Mahabharata?".
Ganapati sonrió y dijo: "Lo haré, pero no debe haber pausa ni interrupción".
Vyasa le respondió: "Muy bien, Señor, pero te suplico que sólo escribas después de comprender el significado literal y simbólico de aquello que te dicte". El dios con cabeza de elefante estuvo de acuerdo.
Cuando Vyasa vio a Ganesha escribir a la misma velocidad de su pensamiento usando su colmillo roto como pluma, concluyó que no tendría tiempo para componer nuevos versos, por lo que le dictó algunos con 108 significados. Mientras Ganesha se detenía para meditar en ellos, el sabio componía otros mil versos con su poderoso intelecto.

Así fue escrito el famoso Mahabharata, el relato épico más extenso del mundo.
No es de extrañar que con Vyasa como poeta, Ganesha como escriba y Krishna como personaje principal, este poema no tenga paralelo.
Esta historia enseña que para todo trabajo, especialmente el relacionado con el conocimiento, necesitamos la gracia divina pero también requerimos del auxilio divino para comprender cabalmente todos los significados simbólicos de los textos sagrados.

sábado, 25 de febrero de 2012

Esta semana en el Ciclo de Cuentos Hindúes.... UN CUENTO DE OSHO...



CUENTO DE OSHO


En un bosque cerca de la ciudad vivían dos vagabundos. Uno era ciego y otro cojo; durante el día entero en la ciudad competían el uno con el otro.

Pero una noche sus chozas se incendiaron porque todo el bosque ardió.
El ciego podía escapar, pero no podía ver hacia donde correr, no podía ver hacia donde todavía no se había extendido el fuego.
El cojo podía ver que aún existía la posibilidad de escapar, pero no podía salir corriendo - el fuego era demasiado rápido, salvaje- , así pues, lo único que podía ver con seguridad era que se acercaba el momento de la muerte.

Los dos se dieron cuenta que se necesitaban el uno al otro.
El cojo tuvo una repentina claridad: "el otro hombre, el ciego, puede correr, y yo puedo ver". Olvidaron toda su competitividad.

En estos momentos críticos en los cuales ambos se enfrentaron a la muerte, necesariamente se olvidaron de toda estúpida enemistad, crearon una gran síntesis;
se pusieron de acuerdo en que el hombre ciego cargaría al cojo sobre sus hombros y así funcionarían como un solo hombre, el cojo puede ver, y el ciego puede correr. Así salvaron sus vidas. Y por salvarse naturalmente la vida, se hicieron amigos; dejaron su antagonismo.

Zorba está ciego- no puede ver-, pero sabe bailar, cantar, regocijarse. Buddha ve, pero él solo puede ver, pero no puede bailar, no puede cantar ni regocijarse.
Ya es hora.


...El mundo está en llamas.
La vida de todos está en peligro.
El encuentro del Zorba con el Buddha puede salvar a toda la humanidad.
Su encuentro es la única esperanza. 




domingo, 19 de febrero de 2012

Esta semana en el Ciclo de Cuentos Hindúes.... Así es la Vida...




ASÍ ES LA VIDA

Un agricultor pacífico y tranquilo que vivía con su hijo vio un día que su único caballo se había escapado del establo. Los vecinos no dudaron en acercarse a su casa y condolerse por su mala suerte.
- Pobre amigo, qué mala fortuna. Has perdido tu herramienta de trabajo. ¿Quién te ayudará ahora con las penosas tareas del campo? Tú solo no podrás, y te espera el hambre y la ruina.

Pero el hombre únicamente contestó: -Así es la vida.
Pero dos días después su caballo regresó acompañado de otro joven y magnífico ejemplar. Los vecinos esta vez se apresuraron a felicitarlo.
-¡Qué buena suerte, ahora tienes dos caballos.
Has doblado tu fortuna sin hacer nada! El hombre sólo musitó: -Así es la vida.

Pero a los pocos días el padre y su hijo salieron juntos a cabalgar. En un tramo del camino, el joven caballo se asustó y tiró de la montura al muchacho, que se partió una pierna en la caída. Nuevamente los vecinos se acercaron a su casa.

-Sí que es mala suerte; si no hubiese venido ese maldito caballo, tu hijo estaría sano como antes, y no con esa pierna rota que Dios sabe si sanará.
El agricultor volvió a repetir: -Así es la vida.

Pero ocurrió que en aquel reino se declaró la guerra y los militares se acercaron a aquella perdida aldea a reclutar a todos los jóvenes en edad de prestar servicio de armas.
Todos marcharon al frente menos el hijo del agricultor, que fue rechazado por su imposibilidad de caminar. Los vecinos fueron otra vez a casa del agricultor, en esta ocasión con lágrimas en los ojos.

-¡Qué desgracia la nuestra, no sabemos si volveremos a ver a nuestros hijos; tú en cambio tienes en casa al tuyo con una pequeña dolencia!
El hombre, una vez más, dijo: -Así es la vida.


viernes, 10 de febrero de 2012

Ciclo de cuentos Hindues... Y esta vez, ¿que es lo mas importante?


¿QUE ES LO IMPORTANTE?

Un monje de gran devoción e instruido, cruzaba una vez un río en barca cuando al pasar al lado de un pequeño islote, oyó una voz de un hombre que muy torpemente intentaba elevar unas plegarias. En su interior no pudo por menos que entristecerse. ¿Cómo era posible que alguien fuera capaz de entonar tan mal aquellos mantras? Tal vez aquel pobre hombre ignoraba que los mantras debían recitarse con la entonación adecuada, el ritmo y la musicalidad precisas, con la pronunciación perfecta.

Decidió entonces ser generoso y desviándose de su rumbo se acercó al islote para instruir a aquel desdichado sobre la importancia de la correcta ejecución de los mantras. No en vano, se consideraba un gran especialista y aquellos mantras no tenían para él ningún secreto. Cuando arribó, pudo ver a un pobre andrajoso de aspecto sosegado cantando unos mantras con poco acierto. El monje, con serena paciencia, dedicó algunas horas a instruir minuciosamente a aquel individuo que a cada momento mostraba efusivas muestras de agradecimiento a su improvisado benefactor. Cuando entendió que por fin aquel sujeto sería capaz de recitar los mantras con cierta solvencia se despidió de él, no sin antes advertirle:
-Y recuerda, mi buen amigo, es tal la potencia de estos mantras, que su correcta pronunciación permite que un hombre sea capaz de andar sobre las aguas.

Pero apenas había recorrido unos metros con la barca, cuando oyó la voz de aquel hombre recitar los mantras aún peor que antes.
-Qué desdicha -se dijo a sí mismo-, hay personas incapaces de aprender nada de nada.
-Eh, monje -escuchó decir a su espalda muy cerca de él.

Al volverse vio al pobre andrajoso que, caminando sobre las aguas, se acercaba a su barca y le preguntaba:
-Noble monje, he olvidado ya tus instrucciones sobre el modo correcto de recitar los mantras.
¿Serías tan amable de repetírmelo de nuevo?


martes, 31 de enero de 2012

CUENTOS HINDÚES....


Quiero compartir un ciclo de cuentos Hindúes, cuentos cortos, que siempre llevan dentro, este algo mas...



CUENTO DE LAS DOS VASIJAS

Un aguador de la India tenía sólo dos grandes vasijas que colgaba en los extremos de un palo y que llevaba sobre los hombros. Una tenía varias grietas por las que se escapaba el agua, de modo que al final de camino sólo conservaba la mitad, mientras que la otra era perfecta y mantenía intacto su contenido. Esto sucedía diariamente. La vasija sin grietas estaba muy orgullosa de sus logros pues se sabía idónea para los fines para los que fue creada. Pero la pobre vasija agrietada estaba avergonzada de su propia imperfección y de no poder cumplir correctamente su cometido. Así que al cabo de dos años le dijo al aguador:


-Estoy avergonzada y me quiero disculpar contigo porque debido a mis grietas sólo obtienes la mitad del valor que deberías recibir por tu trabajo.
El aguador le contestó:
-Cuando regresemos a casa quiero que notes las bellísimas flores que crecen a lo largo del camino.

Así lo hizo la tinaja y, en efecto, vio muchísimas flores hermosas a lo largo de la vereda; pero siguió sintiéndose apenada porque al final sólo guardaba dentro de sí la mitad del agua del principio.

El aguador le dijo entonces:
-¿Te diste cuenta de que las flores sólo crecen en tu lado del camino? Quise sacar el lado positivo de tus grietas y sembré semillas de flores. Todos los días las has regado y durante dos años yo he podido recogerlas. Si no fueras exactamente como eres, con tu capacidad y tus limitaciones, no hubiera sido posible crear esa belleza. Todos somos vasijas agrietadas por alguna parte, pero siempre existe la posibilidad de aprovechar las grietas para obtener buenos resultados.


martes, 5 de abril de 2011

Cuando las cabezas de las mujeres se juntan alrededor del fuego

UN CUENTO HERMOSO QUE ME PASO LOLA Y QUIERO COMPARTIR CON TODAS USTEDES.




Cuando las cabezas de las mujeres se juntan alrededor del fuego

 Simone Seija Paseyro

Alguien me dijo que no es casual…que desde siempre las elegimos. Que las encontramos en el camino de la vida, nos reconocemos y sabemos que en algún lugar de la historia de los mundos fuimos del mismo clan. Pasan las décadas y al volver a recorrer los ríos esos cauces, tengo muy presentes las cualidades que las trajeron a mi tierra personal.
Valientes, reidoras y con labia. Capaces de pasar horas enteras escuchando, muriéndose de risa, consolando. Arquitectas de sueños, hacedoras de planes, ingenieras de la cocina, cantautoras de canciones de cuna.
Cuando las cabezas de las mujeres se juntan alrededor de “un fuego”, nacen fuerzas, crecen magias, arden brasas, que gozan, festejan, curan, recomponen, inventan, crean, unen, desunen, entierran, dan vida, rezongan, se conduelen.
Ese fuego puede ser la mesa de un bar, las idas para afuera en vacaciones, el patio de un colegio, el galpón donde jugábamos en la infancia, el living de una casa, el corredor de una facultad, un mate en el parque, la señal de alarma de que alguna nos necesita o ese tesoro incalculable que son las quedadas a dormir en la casa de las otras.
Las de adolescentes después de un baile, o para preparar un examen, o para cerrar una noche de cine. Las de “veníte el sábado” porque no hay nada mejor que hacer en el mundo que escuchar música, y hablar, hablar y hablar hasta cansarse. Las de adultas, a veces para asilar en nuestras almas a una con desesperanza en los ojos, y entonces nos desdoblamos en abrazos, en mimos, en palabras, para recordarle que siempre hay un mañana. A veces para compartir, departir, construir, sin excusas, solo por las meras ganas.
El futuro en un tiempo no existía. Cualquiera mayor de 25 era de una vejez no imaginada…y sin embargo…detrás de cada una de nosotras, nuestros ojos.
Cambiamos. Crecimos. Nos dolimos. Parimos hijos. Enterramos muertos. Amamos. Fuimos y somos amadas. Dejamos y nos dejaron. Nos enojamos para toda la vida, para descubrir que toda la vida es mucho y no valía la pena. Cuidamos y en el mejor de los casos nos dejamos cuidar.
Nos casamos, nos juntamos, nos divorciamos. O no.
Creímos morirnos muchas veces, y encontramos en algún lugar la fuerza de seguir. Bailamos con un hombre, pero la danza más lograda la hicimos para nuestros hijos al enseñarles a caminar.
Pasamos noches en blanco, noches en negro, noches en rojo, noches de luz y de sombras. Noches de miles de estrellas y noches desangeladas. Hicimos el amor, y cuando correspondió, también la guerra. Nos entregamos. Nos protegimos. Fuimos heridas e inevitablemente, herimos.
Entonces…los cuerpos dieron cuenta de esas lides, pero todas mantuvimos intacta la mirada. La que nos define, la que nos hace saber que ahí estamos, que seguimos estando y nunca dejamos de estar.
Porque juntas construimos nuestros propios cimientos, en tiempos donde nuestro edificio recién se empezaba a erigir.Somos más sabias, más hermosas, más completas, más plenas, más dulces, más risueñas y por suerte, de alguna manera, más salvajes.
Y en aquel tiempo también lo éramos, sólo que no lo sabíamos. Hoy somos todas espejos de las unas, y al vernos reflejadas en esta danza cotidiana, me emociono.
Porque cuando las cabezas de las mujeres se juntan alrededor “del fuego” que deciden avivar con su presencia, hay fiesta, hay aquelarre, misterio, tormenta, centellas y armonía. Como siempre. Como nunca. Como toda la vida.